Las cándidas pueden encajar en los receptores hormonales de las células compitiendo con hormonas. El problema es que pueden imitar a las hormonas pero no pueden llevar a cabo las funciones de éstas.

También pueden crear receptores de nuestras propias hormonas en sus superficies.

Esta intromisión en el sistema hormonal puede causar desequilibrios como el síndrome premenstrual (hinchazón, dolor de pechos, cansancio, dolores de cabeza, cambios de humor...), infertilidad, miomas, endometriosis...

Resolviendo la candidiasis se pueden resolver, a la vez, estos desequilibrios hormonales.