Me apena muchísimo ver cómo sufren algunas (por no decir muchas) de las personas que hacen un tratamiento para mejorar su salud, y que implica hacer cambios drásticos en su alimentación.

De repente su entorno, familia, amigos, pareja, se vuelven expertos en salud y en nutrición. Todo el mundo opina, todo el mundo sabe cómo mejorar la salud de esa persona, aconsejándole comer de todo, volver a comer pan (porque es el alimento de toda la vida), fruta (porque es sanísima), arroz (porque siempre hemos comido paella todos los domingos) etc etc etc.

Ya está bien de atosigar y de dudar de personas que han decidido, por convicción propia, iniciar un cambio de estilo de vida.

Ya está bien de presionarles diciéndoles que ya no son las de antes, que ahora ya no son divertidas porque no beben alcohol, que es aburrido salir a cenar con ellas porque no comen postre, que les están tomando el pelo con tratamientos…

Una vez lo dije en un post y lo vuelvo a repetir… veo mucho más sufrimiento por la opinión y presión del entorno que por la dificultad del tratamiento y cambio de dieta.

Por favor, dejemos de cuestionar a la gente sobre lo que está haciendo y preocupémonos más de lo que hacemos cada uno de nosotros y de cómo está nuestra propia salud. Tal vez muchas de las personas que tanto opinan necesitarían también hacer un tratamiento y cambios en su vida.