.
Así que mi sugerencia es que si estás invitad@ y no puedes escoger el menú, deja que te sirvan lo que hay, y ofrece con naturalidad y discretamente lo que no puedes comer a las personas que tengas al lado, con cualquier excusa (alergias, exceso de cantidad, poca hambre...), y sobre todo brinda con todos!!!!! aunque no bebas.  Cuando la comida está ya en marcha, ya nadie se da cuenta de si comes o no comes, bebes o no bebes… lo que llama la atención son los platos y copas vacíos.
.
Eso sí, previamente come o cena algo en tu casa. No vayas con el estómago rugiendo porque así es muy difícil mantener la dieta o que el malhumor por «querer y no poder» pase desapercibido… y recuerda que la vida no sólo consiste en comer, también compartir momentos y disfrutar de la compañía es nutritivo, enfócate en eso.